jueves, 6 de junio de 2013

Balas.

—¿Por qué sigues escribiéndole a alguien que no te lee? A alguien que ha pasado página, a alguien que ni siquiera se acuerda de ti...
«Bang.» Tocada. Esas palabras llegaban a mi corazón en forma de bala. Él, quien dispara. Yo, la disparada. Su boca, el revólver. Y sus palabras, las que me perforan el corazón.
Seguía hablando, pero ya ni le escuchaba. No podía. Sus palabras me habían dejado pensando.  ¿Para qué seguir escribiendo, si a quien le escribes ya se ha olvidado hasta de tu nombre?
—... Él ya no te recuerda chica, acéptalo ya... —eso es lo que pude oír únicamente de todo lo que decía, como si mi mente solo me dejara escuchar las palabras que más duelen, que más hieren.
Sabía que él no lo decía con mala intención, que solo intentaba protegerme para que no sufriese, pero no, no podía aguantar con tanta verdad. 


«La mentira duele, pero la verdad aún duele más.»

—... Y mírate ahora, ya no tienes esa sonrisa que solías tener siempre. Tu sonrisa se ha substituido por unos labios agrietados que se curvan hacia abajo. Y esas ojeras... Ya no eres más que tristeza y melancolía, y todo por culpa de él.
«Bang.» Otra bala. Cómo duelen las verdades, ¿eh?
Y mis ojos se encharcaban. Lágrimas de impotencia, de rabia... Pero él continuaba hablando y, a la vez, dejando heridas internas.
—Sigo escribiéndole porque me quedaron demasiadas cosas por decirle. Me callé muchas cosas que se fueron juntando hasta formar un nudo en la garganta que solo se desata cuando escribo. Y si ya no sonrío no es por su culpa, no. Es culpa mía no saber olvidar a quien me ha olvidado. 
«Bang.» Mis propias balas contra disparadas contra mí misma.


... Cuando alguien importante en tu vida se va y sabes que no 
volverá jamás, lo mejor es escribirle. Aunque no lo vaya a leer. 
Escribir algo fugaz o algo interminable. Escribir para decir todo 
aquello que no pudimos decir antes... 


[Escrito por: _LadyShadows.]

No hay comentarios:

Publicar un comentario